
Estimulación de puntos reflejos en la oreja conectados con todo el cuerpo. Se usan microesferas adhesivas (no agujas) que aplican presión suave.
Esta técnica aprovecha que la oreja contiene puntos reflejos de todos los órganos y sistemas. Al estimularlos con pequeñas esferas magnéticas o semillas, se envían señales al cerebro que ayudan a regular funciones corporales. Es especialmente útil para controlar ansiedad, insomnio, impulsos alimenticios y adicciones como tabaquismo. También se emplea en tratamientos para el dolor crónico (migrañas, lumbalgia), alergias estacionales y desequilibrios hormonales leves. Las microesferas se colocan en sesiones breves y permanecen varios días, permitiendo una estimulación continua. Muchos pacientes notan efectos calmantes desde la primera aplicación.
Una terapia fácil y rápida, con actuar continuado en el tiempo y nada instrusiva.